8.3.07

Con cien naranjas por banda.

Resulta que hoy, nada más entrar en el trabajo, me he ido a por la SuperJefa, la mala leche en persona, concentrados en 1.40 m de altura, para anunciarles mi curso. Yo me temía que me dijera que no (suponiendo que pudiera prohibirme algo), me temía que me dijera que estaba despedida (el hecho más lógico y el más esperado), o que si, de acuerdo: te damos los días libres que necesites (pura fantasía, pero si cuela, cuela). Su respuesta, tras unos segundos de duda, ha sido algo así como: "¿A qué hora puedes entrar entonces?".

Mierda, con esto no había contado.

Siendo positifos, nunca negatifos, me encuentro con que sigo teniendo trabajo -por desgracia el mismo, de momento- y la posibilidad de ir al curso. Debería estar durmiendo ya, pero me he acercado al ordenador para ver mi resultado en la redacción. Para más inri, el tutor ya me escribe directamente en inglés. Ahora me da palo decirle que no he pillado la mitad de las cosas que dice, pero no me da palo admitir que, cuando escribí I have got little affraid en el post anterior, debería haber escrito I have a little affraid (sin got, que me suena a vaso en valenciano). Bien o mal escrito, también he superado la prueba. Vaya, parece que estamos en racha (parece, he dicho parece)

Más: necesito cambiar de móvil. Mucha carcasa nueva, y mucho kit de manos libres nuevo, pero esto se está fundiendo ya. Le tengo mucho cariño y todo eso, pero... renovarse o morir, y como yo no tengo pensado morirme nunca... Bueno, pues llamé a mi compañía azul de móviles para ver qué se podía hacer con mi cacharrillo... y me encuentro con centralitas, pulse uno, pulse dos, pulse, pulse, pulse... ¡Que me va a salir más barato comprarme un móvil que llamar a la central! Si yo sólo quería saber si podían facilitarme uno, así, by the face, por el simple hecho de que me cambié a contrato y no me regalaron nada... Pues va a ser que ya ronda por mi mente perversa dos opciones:
1. Comprarme un pack de prepago con un teléfono que me guste (tengo debilidad por los Nokia)
2. Fugarme de compañía.
A mi padre, por la portabilidad (o sea, cambiarte de una compañía a otra), le han regalado por cuatro perras chicas un Sony Ericsson z601i que-te-cagas-vivo. Joer, si me dieran uno así, no me importaría que no fuera Nokia.

Bueno, pues me acuesto ya, que me levanto a las seis (o sea, dentro de ya mismo). Ya os contaré qué tal me va y todo eso. Ufff, acabo de acordarme que tengo que terminar el tercer curso que me dieron, porque termina el plazo esta semana... Ays, que quiero un poquito de paz... y no me dejan...

Sed buenos y grandes, que la humanidad necesita personas como vosotros.

He dicho!

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Bueno.... nostámal! No has perdido el curro (eso querías no? Aunque sea de momento) y te dejan ir al cursillo.
Tú eres "la leche" y puedes con todo...., pero MIARMAAAAA para otra vez no te apuntes a 20.000 cursos, cursillos, oposiciones.... que te va a dar algo muchacha!!!
Las cosas de una en una, que luego se acumula la faena! Hombreya!
Un megabeso!

Satrústegui dijo...

Pues si no le convence vengase con nosotros los que antes bailaban de verde y ahora se llaman como un cítrico (bueno... es posible que le traigan malos recuerdos... mejor no venga!).