31.7.07

Hablando sin conocer.

Siempre -siempre- me asombro de la capacidad que tiene la gente de tener un concepto sobre tí sin conocerte. Puede que te conozcan de oídas, de vista, o a saber de qué referencias, pero está claro que la estima en la que me tienen algunos está completamente equivocada. O no.

Pueden hablar con conocimiento de causa, jurar y rejurar que presenciaron lo que les dijo la vecina del primo de la mujer del cuñado del cuarto derecha, afirmar y dar su palabrita del niño Jesús sobre algo que, en realidad, ni te hace falta, y tampoco han presenciado porque jamás te vieron ni una sola vez antes de tales afirmaciones.

Bocazas...

Es que me llama mucho la atención la cantidad de correos que recibo. Hay una gran cantidad de gente que sabe qué necesidades tengo, qué me hace falta, qué necesito para ser más feliz. Vale que mi vida sesuá sea más escasa que el agua en los desiertos, pero creo que se han equivocado de medio a medio conmigo.

Es que yo no necesito alargarme el pene. Y no lo entienden, e insisten con sus correos conque yo necesito precisamente eso para ser feliz en mi vida.

...Claro que a lo mejor tienen razón.

...A ver si un día se me cruza el cable, y acabo armada. Y ya, puestos, sería la envidia de muchos de los que me leen, porque ya que me pongo, me pongo. Con alegría.

¿Qué? ¿Pongo foto? XD

30.7.07

Manchas de mora.

¿Sabéis lo que es una morera? Pues es un arbolito que se llena de avispas y tiene unos frutos que, si son negros, están maduros, y si están rojos, están pelín verdes. De pequeña yo jugaba alrededor de una que tienen unos amigos de mis padres en el chalet, y me subía en ella cuantas veces quería debido a una forma muy rara de su tronco, que facilitaba bastante el ascenso. Pillaba un puñado de moras negras, y cuando tenía la mano llena, las espachurraba, dejando caer el jugo, rojo como la sangre, y me manchaba la cara, la ropa, al tiempo que salía gritando "¡Sangreeeeeee!", haciendo que más de una vez, a mis padres estuvieran a punto de darles los tres infartos creyendo que me había pasado algo. Tiempo después, ya no me hacían caso, pero yo seguía estropeando la ropa que daba gusto, dando alaridos, como si hubiera sido la única superviviente de una matanza en la morera. Y si os soy sincera, no tengo ni la más mínima idea si la mancha de mora se quitaba con otra verde, o qué, pero desde luego, me costaba horrores hacer que saliera esa sangre de mi piel, porque la jodía no se iba ni a tiros. Pero yo me divertía, y seguía con mis truculentas historias.

Tiempo después, me hice mayor y dejé de mancharme la ropa y la cara, pero seguí comiendo las moras negras, aunque tuviera que ir espantando avispas. Ninguna de ellas me impediría degustar ese sabor ácido...

Lo que pasa, es que entre árboles y árboles, yo prefiero las moreras, porque por ejemplo, los limoneros tienen pinchos, los almendros dan un fruto muy amargo al natural y, si incluímos las plantas, cuando comes pipas directamente del girasol se te quedan los labios y los dientes negros.
Qué bonita es la morera, párdiez. Con sus moras negras, sus moras verdes... y con sus refranes.

Casualmente, hoy he estado cerca de una. Tan cerca, que yo no sé porqué no me he subido y he recreado una de mis matanzas infantiles, pero he pensado que la gente con la que estaba no lo pillaría.

Cachis, estoy madurando.

Como las moras.

25.7.07

Déjà vu

-Mi novia no me comprende...
-...
-Contigo es diferente...
-...
-Contigo me siento muy bien...
-¿?
-A tí te he contado cosas que jamás le había contado a nadie...
-¿¿¿¿¿...??????
-Me gustaría estar un fin de semana contigo, a solas, lejos de todo...
-¡¡¡¡¡¡...!!!!!!
-Eres muy importante para mí...
-%&&&//&%$/()/&%&/...
-No me gustaría perderte... Pase lo que pase, seremos siendo amigos...
-(¿?)
-¿Qué opinas?

...¿Habéis montado alguna vez en un centauro? Vale, yo tampoco. Pero fue escuchar eso y sentir que esa película ya la había visto. Así que me cambié de cine.

Desde luego... yo quería ser superficial, pero hay cosas por las que no paso. Y como de los escarmentados salen los avisados... :P

13.7.07

La tele no miente

Me acuerdo de que mi abuela tenía la costumbre de tragarse cuanto saliera en la tele. Con ello no quiero decir que viera programa tras programa, sino que estaba completamente segura de que todo cuanto decían en la tele era verdad, todo cuanto saliera en la tele había ocurrido de verdad, y todo cuanto apareciera en la tele era real como la vida misma.

Será cuestión de genes, de parentesco, tradición familiar o a saber qué, pero ahora mismo me siento igual que mi abuela. Lo que salía en la tele era verdad, era real, era cierto.



La única pega es que con la entrada del concierto no tuviera derecho a un bis-a-bis con el susodicho, por lo menos para tocar con mi inocente dedo índice una de sus tetillas, rozarle la barbita, u olerle.

Pero es curioso -muy curioso-, cómo puedes pasar, con sólo su aparición, de cero a cien en 0.000000001 segundo. Y sin gasolina.

Eso sí: menos mal que me gustaba su música desde hacía mucho tiempo. Si no, iba a parecer yo a saber qué.

Qué razón tenía mi abuela. Otro genio incomprendido en la familia... Si me viera ahora, completamente convencida, se sentiría orgullosa de mí. Snif.

8.7.07

Qué disgusto, po dió....

La Alhambra no es una de las siete maravillas del mundo. La Alhambra será una maravilla, y estará en el mundo, pero no es una de las siete que dicen que son las más mejores del mundo. Cachis. Vaya disgusto. Como si no estar en esa lista supusiera que ya nunca más fuera a visitarla nadie. Ya pueden desmontarla, y cerrar chiringuito, porque no es una de las siete maravillas del mundo. Mierda. Tantos años para ahora este disgusto. Quiero de morirme. Mi vida ya no tiene sentido. Ninguna vida tiene ya sentido. Como si el estar en esa lista fuera el leif motif de su existencia. ¿Lo es? Pues que le den por saco a la lista.

Estoy tan disgustada que recuerdo un día que una compañera de trabajo me enseñó unas fotos de su viaje a Jordania. Vaya, y me enseñó una a las puertas de la Ciudad de Petra. La comparé con Indiana Jones, por aquéllo del final de la película, con la puerta excavada en la roca, y saliendo a caballo por el desfiladero.

Porque al fin y al cabo, contemos. ¿Cuántos españoles habitamos en el mundo? Y si el mundo tiene 6.000 millones de personas... cachislamar, ¡¿cómo no íbamos a perder?! Somos inferiores en número. Y la gente que vota suele ser partidista por el monumento más cercano, o el más afín a su cultura...

Qué queréis que os diga... Casi mejor que la Alhambra no sea una maravilla. A fin de cuentas, seis de siete de las antíguas maravillas del mundo desaparecieron muchos años ha. Y a nuestro participante, esperemos, le quedan muchos milenios aún de vida.

O por lo menos, que se esperen a que vaya yo.

Si, hoy estamos todos con un disgusto impresionante. Entre esto, y la mala pata de Alonso... No sé cómo vamos a levantar cabeza.

Ps: ¿¡Qué más puede pasar!? ¿Eh? ¿EH? O están de reformas en el wés, o me he cargao el contador sin hacer nada. Si ya decía yo. Que asco de vida... :D

4.7.07

Y yo pensaba que me había librado...

...Gracias a Jabi, haré el meme. Hace unos cuantos posts hice algo parecido, pero vamos, que ocho cosas más sobre mí tampoco molestará a la blogosfera. (Jabi, te odio)

Ah, y ni se la voy a pasar a nadie, ni voy a poner las reglas -vale, está lo de cortar y pegar-, pero ni eso, así que no sus pasei. (Jabi, te odio)

1. El trabajo más raro que he tenido fue el de repartidora de propaganda para una empresa que se dedicaba a hacer cuadros con tu escudo heráldico (tomayacañón) (Jabi, te odio)

2.Estuve un tanto asín de irme al ejército, pero por la miopía no me iban a admitir, así que cambié de idea, para alivio de mis progenitores. Años depués, odié a Jabi.

3.El día que fuí a recoger mi diploma universitario, me llevé la cámara de fotos. Me hicieron dos fotos en la puerta de la facultad con mi diploma en las manos. Y yo salgo radiante, y orgullosa, antes de odiar a Jabi.

4.Para dormir, necesito dos cosas: estar boca abajo y tener una almohada superhipermegablanda. Lo demás, sobra. Y cuando duermo, no odio a nadie.

5.Me gustan las faldas con botas en invierno.

6.Soy muuuuuuuuuuy tonta. Todo el mundo en el que confío -sin excepción- me la da en los dos carrillos. Una detrás de otra. Y me las trago. Tonta o buena. No sé. De ahí a que me cueste confiar en la gente y mantenga las distancias.

7.Tengo fama de ser inteligente. Muy inteligente. Lo que pasa es que, si leemos el punto 6, veremos que hay incongruencias con el 7.

8.Esto es para contarlo: cierto jugador de fútbol de primera división -en activo- que se deja caer por la aldea de vez en cuando, me mira con ojos de corderito degollado cada vez que me lo encuentro. No nos han presentado ni nada, pero no sabéis qué satidsfadción da que una estrella futbolística -no, no es Beckham-, rodeado de chicas siempre, mantenga la vista fija en mi persona cada vez. Definitivamente, no doy asco. Y no digo nombres, que la liamos (pero es verdad... se le ilumina la cara cuando me ve aparecer....)

Así que ahora, todos juntos: odiamos a Jabi.

Ale, el meme se lo paso a Maxibombón (Maxiboom suena mejor), para que vea que mal de muchos...

Ps: He dicho que no se lo iba a pasar a nadie. Pero es pa jodé.

La buena chica

Hoy he ido a donar sangre. Tal muestra de altruismo está entre la generosidad propiamente dicha, como el hecho de que mi grupo sanguíneo no sea demasiado abundante -los hay más difíciles de conseguir- y quiera echarme el pegote de lo buena que soy dando litros y litros de mi oro rojo a completos desconocidos que a saber qué harán con ellos. Yo, por si las moscas, sigo con mi hábito de la buena acción del día.

Gracias a esta costumbre, me han regalado camisetas que no me pongo, pins que guardo en el cajón-pa-tó, bolis que se secan, o abanicos que se rompen. Hoy me han dado una camiseta. Esta camiseta me ha costado sangre conseguirla -literalmente, por eso la dan-, y claro, todo el mundo es donante por las camisetas tan imprescindibles para la humanidad que obsequian.

Bueno, pues al entrar, y con la chicharrina que estaba cayendo hoy -un ponientazo de la muerte-, me ofrecían algo pa de bebé. Como mi porcentaje de líquidos aún no había menguado -dicen que tenemos el 70% de agua-, he rechazado esa cocacolita fresquita. Y como soy muy valiente, me he ido derechita al médico que te toma los datos, y a la enfermera que te toma la tensión.Tras darme un peazo camiseta roja que pienso ponerme en la próxima boda a la que acuda, me he encaminado a la siguiene estación: otro médico que enlazaba una pregunta con otra: hastomadosustanciasestupefacienteshasconsumidodrogasinyectadas hasmantenidorelacionessexualesconparejasesporádicas y cosas así. A todo lo que me decía yo le decía que no, pero vaya, que tengo que tener pinta de casquivana endrogadista, porque sonreía mientras yo le contestaba. A cambio de ser amable y contestarle muy educadamente, me ha pinchado el dedo corazón y me lo ha estrujado para dejar caer una gotilla en un liquidito azul (eso, para la anemia, pero no tengo), y luego -creo- me ha hecho la prueba del azúcar con un aparatito que jamás de los jamases había visto, a costa de estrujarme el dedo aún más. Con el dedo ya roto, me ha dirigido hacia unas enfermeras que, junto a unas camillas, me esperaban. ¿Brazo? Izquierdo, of course (yo siempre elijo el izquierdo, por si hay complicaciones y me lo tienen que amputar) (yo es que soy diestra), y me sacan un peazo aguja que parecía el túnel de Guadarrama.

Yo es que soy muy curiosa, y siempre -SIEMPRE- miro cómo me clavan semejante agonía en el brazo. Picar, pica de narices. Pero el rollo es cuando la sangre no cae y tienen que mover la aguja en tan tierno sitio y... ¿Eh? Vale, me callo.

Allí, en la camilla, tumbada, abriendo y cerrando la mano, he dejado salir de mí mis 450 ml de sangre que algún afortunado disfrutará. Tras mi acto de altruismo, me he levantado como si nada -donar sangre me sienta muy bien-, me he ventilao el bote de cocacola y me han obsequiado -no sólo a mí- con una mini botella de horchata que casi me ha hecho más ilu que la camiseta.

Así que como no me endrogo, no me inyesto drongas, y no he mantenido relaciones sexuales sin protección con nadie en los últimos seis meses, no pertenezco a ningún grupo de riesgo y tampoco tengo pareja sesuá estable -ni inestable-, he donado sangre. Pero como ya he donado sangre, ya puedo endrogarme, inyestarme, mantener relaciones con el Centauro y con Beckham si se dejara, a pelo o sin pelo- y hacer lo que me salga de la arteria del brazo izquierdo.

Porque soy donante, porque es verano y porque sigo en el paro. Con tanto tiempo libre, no sé por dónde empezar.

...El Centauro tiene buena pinta, pero no sabe elegir películas (vimos la de Shrek) (si, qué romántico) (ja-ja)

Ps: No sé si habéis visto que tenemos chica nueva en la oficina. Maxibombón está enlazada y he corregido un par de enlaces que estaban mal. Y si estaban mal desde que los puse... ¿¿¿¿CÓMO ES QUE NADIE ME HA DICHO NADA???? (os odio)

Ps2:Oooooooooh... me acabo de dar cuenta de que me ha salido una moradura por la aguja, a dos dedos del bujero que me han hecho. Eh... a los que quieran donar sangre y tengan miedito, y hayan querido informarse antes... no leáis este post. Hacedme caso, po dió.