11.5.07

El fin del romanticismo

Sabes que el romanticismo se esfumó cuando tras una copa, una cena, o yendo a comprar palomitas al cine, la otra persona se deja de historias y lo dice directamente:
-Esta la pagas tú.

O lo que es peor. Que tras la copa, la cena, o con las palomitas, te suelte algo como:
-Me ha salido una fístula en el ano.

Empeoremos la cosa. Que tras la noche de pasión, se levante la otra persona, y te diga:
-El mes pasado me cambié de sexo.

O peor aún: que cuando termine, te diga:
-Págame.

...O que cuando abras el ojo te veas que se está poniendo TU ropa (interior incluída)

Así que lo tengo claro: por mucho que me digan, que te abran la puerta de los sitios a los que vayas a entrar NO es romántico, sino más bien arcaico. Pero sé que hay cosas peores.

Mucho peores.

De ésas que luego causan remordimientos.

Je je je.

Ps que no viene a cuento: (Ya sabe quién es): holaaaaaaaaaaaaa, cuánto tiempo...

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Eufrasia!

Espero que no cuentes esas cosas porque las hayas sufrido en persona... tu también? ejem esto... bueno que me tengo que ir

boas noites

Satrústegui dijo...

Puff... pues entre la borrachera que llevo ahora mismo y lo raro de este post pos la verdad es que me he quedao pillao, así que cuando se me pase lo comentaré en condiciones...

Satrústegui dijo...

Bueno... en el mundo en el que me muevo eso de pagar cada uno o de invitar cada uno una ronda es bastante habitual, y eso que mi madre querida me enseñó el hábito de pagar la cuenta por las damas. Lo de las puertas también lo hago, ellas suelen sorprenderse mucho...

Sobre las sorprendentes anécdotas yo espero que no te hayan pasado y ruego al destino que tampoco me pasen... debe ser terrible (sobretodo lo de la fístula).

LaReinaDelSur dijo...

Oooops!
Que mal rollito lo de la fístula, no?
Yo también espero que no te haya pasado nada de eso.
Un petonet!