7.2.08

La historia la escriben los vencedores.

Hace tiempo leí la biografía de Juana de Aragón y Castilla, más conocida como "La Loca" y me dejó un regusto amargo. Pasó de ser la prefe de su madre, a ser ninguneada por todos los hombres de su vida. A pesar de ser ella la que tenía el poder, los títulos y estar en su país, primero su padre -que la casó por conveniencia con Felipito el Hermoso-, luego por su hermoso esposo -que lo he visto en retratos y de hermoso tenía más bien poco- y luego por su hijo, Carlos V (o Carlos I, depende del lugar del imperio en donde lo nombraras).

A mi entender, la putearon a base de bien. Tal vez su padre la expuso a estar a la sombra de su marido. Su marido sería guapísimo, pero cerdo fue un rato. Y entonces, por lo que cuentan, empezó a desequilibrarse, por la cantidad de cositas que decían que hacía. Tras enviudar de Felipito y llevarlo de peregrinación por media España -no quiero ni pensar a qué olería la cosa a la semana-, la encerraron en Tordesillas, creo. Allí acabaron apartándola también de sus hijos. Y allí, apartada primero por su padre, y luego por su propio hijo -que también le fue arrebatado de pequeño- pasó muchos y largos años hasta su muerte.

La historia la escriben los vencedores. ¿No os dáis cuenta del detalle? El que ostenta el poder lo acomoda a su antojo. Ni qué decir tiene que hay verdades que no se pueden ocultar, pero el escritor de historias maneja la realidad a su gusto, enseñando lo que quiere enseñar, ocultando lo que no interesa que se sepa, y exagerando o inventando para triturar a alguien o alguienes, menospreciando e ignorando a otros que, tal vez, sufrieron peor suerte. Además, el machismo también hizo lo suyo, y a estas alturas, yo me pregunto si de verdad la infanta Juana, que después fue reina, estuvo tan loca como cuentan.

Otra mujer que tiene historia con tintes de culebrón fue Lucrecia Borgia, cuya biografía también leí. Y, a mi entender, las dos, Lucrecia y Juana, fueron víctimas de los tejemanejes de su familia, casadas por conveniencia, manipuladas por su entorno, y si alguna vez fueron felices, fueron los suyos los que se preocuparon en que dejaran de serlo. Objetivo de calificativos atroces, acusadas de algo que, seguramente, no cometieron -y si hicieron algo, seguramente fue obligadas a la fuerza bruta-, pero que se dejó para la posterioridad para darles mala prensa, porque las historias más truculentas son más difíciles de olvidar. ¡Qué no harían los santos varones de su familia! Pero no. Había que acusar a las mujeres...

Para no pecar de feminista, hablemos de hombres con un papel non grato en los anales de la historia: el papel de Judas en la vida de Jesús me parece injusto. No puedo negar que se cubrió de gloria con lo que hizo. Pero hay un pero. De sus apóstoles, fue el que le entregó, si, pero se arrepintió, y de qué manera. No como otrossssss, que dudaron (Tomás), que le negaron (Pedro) etc..., y que hoy en día siguen siendo santos, tras llevar una vida religiosa sin un mal remordimiento. Claro, que si empezamos a mirar las biografías de los santos... buenoooooooo... ni uno estaría en el cielo... Dos o tres, como mucho... Claro, que si te pones a mirar quién elige a los santos...

Lo que pasa es que parece que hay que creer en lo que te dicen. Pero... ¿quién te lo dice? Podemos estar de acuerdo que el holocausto judío fue una atrocidad, pero... ¿qué papel tienen ahora los judíos en los conflictos actuales? O... ¿qué pasó con los millones de rusos -en número muy superior al de los judíos- que murieron bajo el mandato de Stalin? ¿O qué pasó con los condenados por la inquisición? Y lo que es más interesante.... ¿qué pruebas tuvieron para ajusticiarlos?

A mí siempre me enseñaron a ver por mí misma, y a que no me dejara influir por los demás. Mi perspectiva es tan personal, que me ha causado no pocos problemas con alguna gente. Pero una es así, de todo tiene que haber en la viña del señor...

Por pensar diferente no se es mejor ni peor. No hago daño a nadie, mi pensamiento no matará a ningún ser vivo y el sol seguirá saliendo por el mismo sitio día tras día.

Pero entonces... ¿por qué coño quieren meterme en la cabeza cosas que yo no pienso? ¿No se dan cuenta que lo que hoy es bueno, mañana será malo? ¿Es que son tan influenciables?

Joer, qué profunda me he puesto. Venga, en el próximo post, hablaremos de... yo qué sé. Ya lo pensaré mañana.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Querida Eufrasia,
bien es sabido que hay gente que a costa de no merecérselo, se gana la indiferencia, miedo, repulsión o que se yo de sus semejantes. Es como un halo invisible (pero perceptible) que envuelve al desgraciado y que afecta a quien lo rodea. No digo que sea justo. Más injusta que es la vida...
Y por cierto, cuando dices "pensar diferente" ¿quién te dice a ti que realmente no estás pensando como quieren que pienses?
Perdona por este vómito de palabras. De vez en cuando también se me va la olla.

Por cierto, me ha gustado mucho esta frase: El que ostenta el poder lo acomoda a su antojo.