24.3.09

¡Confiéseme, padre!

Lamu, hace un par de meses, hizo un post en el que nos incitaba y nos instigaba -qué malvada- a dejar al descubierto nuestras predilecciones en materia de uniformes, que nos hiciera cumplir algún sueño. O pesadilla. O yo qué sé. Yo tenía pendiente mi predilección por los uniformes varoniles o de varones (que no es lo mismo). He aquí mi aportación.

Hace unos cuantos eones, en una revista me encontré un reportaje sobre un actor muy famoso -ejpañó- en el que aparecía con su familia. Mis ojos se fijaron en uno de sus vástagos, y pensé "hum... qué cosa tan bonita!". Babeante, estuve mirando la foto hasta que se borró del papel. Años después, me lo he vuelto a encontrar en una serie que tiene tela, tiene miga, pero él está mejorado por el paso del tiempo. He vuelto a babear.

Claro que prefiero (mil millones de veces antes) el contenido al continente.

Es ficción. Por mucho que me guste, jamás lo conoceré. Y si lo conozco, no creo que Rodolfo tenga el más mínimo interés en conocerme a mí. Pero soñar es gratis y la imaginación infinita.

AaAaAhH... Necesito una fregona.

4 comentarios:

LA CALLE VACÍA dijo...

Cachis, desde que hice la mili en marina, que tengo el uniforme guardao a ver simencuentro con alguna que le vaya la marcha marinera y que no hay manera tu. La verdá que con el contenido....es explicable pero ya sabes lo que dicen, que siempre hay un roto para un descosido ;)

Lamu dijo...

Que sean dos esas fregonas! ¿Pero quiés es este hombre que me hace dudar sobre si es más sexy que Lobezno!!?

Eufrasia dijo...

Lamu: te aconsejo encarecidamente (en-ca-re-ci-da-men-te) que veas la serie "La señora".

Fregonas para todos.

Lynze dijo...

Querida Eufrasia,
cuidado con la expresión de la fregona, que más de uno va a pensar mal...