4.4.18

Déjame

Aunque no entiendas cuando te cuento lo que me ha pasado, déjame sentirme como me siento, como me sentía, como me sentí. Y déjame experimentar esas nuevas sensaciones.

La vida es un continuo aprendizaje del que aún me queda mucho por aprender, pero quiero saber, conocer, enterarme, interesarme, ilusionarme una y las veces que hagan falta por la más absoluta variedad de motivos y personas, por lo que, aunque no me entiendas, déjame que quiera conocer ese mundo que me rodea y del cual no tengo ni la más mínima idea a pesar de cada vez conocerlo mejor.

De una simple semilla puede brotar todo un árbol, así que si de mi curiosidad puede salir un brote, qué no saldrá si abono un poco más, si conozco, si sé, si indago, si se me presenta o busca mi encuentro. Hay cosas que simplemente aparecen y que aportan mucho a tu vida, y ahí se quedan contigo cuando la vida sigue y tú continúas por otros derroteros. Aprendí que hay cosas que despiertan eso oculto que tienes en ti y no lo sabías, y una vez despierto te sigue acompañando, porque como esa semilla, crece contigo, y nadie te lo puede quitar, acompañándote, como la primavera, que incluso en el más cerrado de los inviernos sabes que volverá a brotar.

Adoro, repito: adoro conocer a esa clase de gente que se te presenta delante y es capaz también de despertarte en ti eso que tenías dormido, oculto o silenciado, y que cuando sigue su camino tu brillo sigue luciendo. Es gente que te da su polvo de hada, gente mágica, que no te resta, sino que te hace brillar, que te hace creer aún más en ti, en que vieras que no eres lo que los demás te ven, o que no te ven, sino que tienes cosas buenas, y muchas, que otros se encargaron de apagar o de esconder sólo porque ellos no lo tienen o no te ven digna de tenerlo. Y ahí estás tú, maravillada por tu lucecita que no sabías que tenías, y te dedicas a hacerla cada vez más grande. Así que si no entiendes cómo puedo estar avivando algo en mi vida, déjame hacerlo, que tengo mis motivos.

Si ves que cosas que antes me interesaban o gente que crees que me conviene ya no me atraen, piensa que al igual que hay gente que se queda atrás en la vida, hemos encontrado caminos diferentes. Yo no necesito status, dinero o ningún motivo para haber querido estar, ser, sentir, son ellos los que lo buscaban Yo no.. Yo buscaba otra cosa que no me dieron, algo que no tenían y jamás hubiera encontrado a su lado.

Déjame abrir los ojos y darme cuenta de que sonrío sin motivo especial.

Hay cosas que simplemente suceden.

Sientes que hay cosas que ya no tienes. Sientes que hay cosas que has perdido. Y esas cosas dejan de ser una necesidad para notar que realmente eran unas cargas que no te dejaban respirar. Y sabes que no se puede perder nada que no hayas tenido antes, por lo que realmente no perdiste nada puesto que no eran tuyas. Sólo eran mentiras. Farsantes. Postureo. Apariencia. Humo. Nada.

Y cuando ya no esperas nada es cuando sucede todo.