Más trenes.

Oeoeoeoeoeoe... que me enterado de que han abierto otra bolsa de trabajo y nada, que tendré que estudiar para esta también. Pros: que está cerca y pagan bien, horarios matutinos, de lunes a viernes. Contras: que hay que sacar buena nota para quedar por delante de todos los demás, y que son sólo para seis meses. Pues nada, por intentarlo... En el paro ya estoy. Je je je je...

Hay otra empresa very important que me ha contestado sobre un currículum que les mandé hace como... medio año (anda, los de RRHH sí que hacen algo) diciéndome algo así como que les intereso pero (cachis, con los peros) que ahora no tienen ninguna oferta, y que se pondrán en contacto conmigo cuando la tengan (¿veis? lo que yo decía: les encanta hacerse los interesantes)

Están al caer las oposiciones de lo mío (jujujujuju), por lo que debería aplicarme pelín más, que estoy de un zángano... (bueno, no tanto, pero debería estudiar un poco más) (seis horas al día, por lo menos)

Se está acabando el curso, así que ya podemos empezar a cambiar el chip. Yo sigo buscando trabajo, pero vaya, que no me quieren en ningún lado. ¡Vuzotro sus lo perdéi! (estoy de un eufórico preocupante) (eso de verle las tetillas a Beckham... ¿tendrá algo que ver?)

Me han invitado a un café. De máquina, pero café. Hasta me ha hecho ilu, oiga.

Y como toca subir egos, un saludo a Silvia (se acerca la primavera), a su prima Eva (gracias por comentar), a María (jamía, cuánto tiempo sin saber nada de tí), a Goenitz (que me enchufará cuando sea presidente) (y no, de becaria no será) (XD), a Jabi (tu nombre es de origen vasco y significa Casa Nueva) y a mi Leocricia, que últimamente tengo ligeramente descuidada porque no me conecto mucho por estar con el escalofriante mundo de la legislación (aplausos y ovación).

Si me olvido de alguien (ah, si, del Redactor Jefe ¡yujuuuuuu!), que me lo diga. Sigo resfriada y es normal que las neuronas que me queden (dos o tres) estén en reposo.

Ñoras, ñores, me voy a merendar.